En este espacio l@s niñ@s tienen mayor posibilidad de movimiento y al mismo tiempo que se mueven, descubren y aprenden cosas nuevas.
Los juegos que se dan en el recreo permiten a los niñ@s dominar el mundo que les rodea, ajustar su comportamiento a él y, al mismo tiempo, aprender sus propios límites para ser independientes y progresar en su autonomía.
Además, es un medio ideal para la integración, porque es una actividad libre y cada un@ puede desempeñar el papel que quiera en función de sus preferencias y limitaciones, siendo ideal para el desarrollo de la socialización.